ASAMBLEA DE ANDALUCÍA (Conil de la Frontera, Cádiz, 14/05/2016).
El 14 de mayo ha tenido lugar en Conil de la Frontera (Cádiz) el tercer plenario
nacional del colectivo sociopolítico “Asamblea de Andalucía” (AdA) con asistencia de
miembros de diversas comarcas y municipios, la mayoría de ellos también integrantes
de movimientos sociales, sindicatos alternativos y asociaciones culturales. También
participaron, como invitados, miembros de diversas organizaciones.
Tras formarse la Mesa, fueron debatidas y aprobadas las ponencias política y de
organización, que llegaban al plenario tras un periodo de discusión en las asambleas
locales. También fueron elegidos los coordinadores/as de las siete áreas de actuación
del colectivo:
- Área de Análisis y Acción Política: Isidoro Moreno
- Área de Organización: José Gordon
- Área de Movimientos Sociales: Simón Castillo
- Área de Municipalismo: Francisco Cuberos
- Área de Economía y Territorio: Manuel Delgado
- Área de Educación y Cultura: Pura Sánchez
- Área de Comunicación: Antonio Sánchez Morilla
Estos siete coordinadores de áreas, junto a los delegados de las asambleas
locales que sean elegidos por estas en un plazo máximo de 20 días, constituirán la nueva
Coordinadora Nacional.
Tras la discusión de las propuestas de resolución presentadas, se aprobaron por
unanimidad las siguientes resoluciones:
1. Ante las próximas elecciones generales del 26 de Junio, como ya hicimos en las
anteriores del 20 de Diciembre, Asamblea de Andalucía reitera a todos los partidos y
organizaciones políticas que van a pedir el voto de los andaluces la exigencia del
reconocimiento expreso de Andalucía como sujeto político nacional, con todos los
derechos que ello implica, al mismo nivel que los otros pueblos-naciones del Estado
Plurinacional Español. Por su identidad histórica, su identidad cultural y su identidad
política el pueblo andaluz constituye una nación con pleno derecho a decidir libremente
los instrumentos de autogobierno más útiles para luchar contra la dependencia
económica, las desigualdades sociales, la alienación cultural y la subalternidad política,
que son las cuatro dimensiones del actual estado de postración de este país nuestro.
Asamblea de Andalucía no participa en ninguna candidatura electoral ni pedirá el voto
para ninguna de ellas. Pero pedimos expresamente que no se vote a aquellos partidos
que han constituido, o apoyado sin posterior autocrítica, al Régimen político que tiene
secuestrado a nuestro pueblo desde hace más de treinta años en la llamada “autonomía”.
Tampoco deberían votar los andaluces de conciencia a aquellas candidaturas que no
reconozcan a Andalucía como sujeto político nacional, con todos los derechos que ello
implica.
2. Mostramos nuestra preocupación por la manera, apresurada en unos casos y
oportunista en otros, en que algunos pequeños grupos y personas tratan de ocupar el
espacio político del nacionalismo andaluz. Independientemente de las intenciones, que
no cuestionamos, creemos que esto no favorece el avance en la necesaria construcción
del movimiento social y nacional andaluz que haga posible una Andalucía libre e
igualitaria formada por hombres y mujeres libres. Para avanzar hacia este objetivo, el
camino adecuado no es formar partidos u otras organizaciones con muy escasa base y
fines fundamentalmente electoralistas, sea reclamando la patente de un supuesto
andalucismo “auténtico”, sea para ofrecerse, prácticamente sin condiciones, a partidos o
coaliciones para los cuales Andalucía no es prioridad, sino promover y participar en el
necesario movimiento social y político andaluz, fruto de confluencias en las luchas
concretas por los derechos sociales y nacionales.
Este movimiento o confluencia de movimientos debe construirse de abajo arriba,
fortalecerse en los movimientos sociales sectoriales, en las organizaciones sindicales y
políticas, en los ámbitos de la cultura y la comunicación, en las luchas en los espacios
cotidianos. Sólo allí donde se vaya consiguiendo un verdadero enraizamiento popular,
mediante la práctica de un municipalismo combativo e inteligente y la presencia en las
diversas luchas, podría ser adecuado plantearse la conveniencia de estar presentes en las
instituciones, presentándose a elecciones, sean municipales, andaluzas o generales, con
el fin principal de favorecer los movimientos, las luchas y la profundización de la
conciencia política. Es preocupante que algunos compañeros/as andalucistas repitan los
errores y actuaciones del PA, que llevaron a ese partido a la irrelevancia y disolución
por pérdida de credibilidad, alejamiento de las luchas sociales y reducción de la política
al ámbito de las instituciones.
3. AdA valora con preocupación que ninguna opción electoral se defina rotundamente
contra la militarización de Andalucía, consistente no sólo en la acentuación de la
función de las bases de Rota y Morón como plataformas nucleares de intervención de
Estados Unidos y la OTAN en Oriente Medio y África sino también en la creciente
presencia de industrias de armamentos en suelo andaluz, en la celebración de Ferias de
negocios de empresas de armas, como la que acaba de tener lugar en Sevilla con el
patrocinio de la Consejería de Economía de la Junta, en la utilización de partes de
nuestro territorio como escenario permanente de maniobras militares y en la difusión
por diversos medios de la cultura militarista de la violencia. Nos definimos por una
Andalucía con un papel activo en favor de la Paz, tal como corresponde a nuestra
cultura y nuestra historia, y exigimos la reconversión de bases e industrias militares a
usos civiles, la desnuclearización de nuestro territorio y la salida inmediata de la OTAN
y otras estructuras militares.
4. Nos declaramos frontalmente opuestos a los Tratados “de Libre Comercio” (TTIP,
CETA y otros), porque supondrán recortes drásticos de las soberanías nacionales en
favor de los intereses de las grandes corporaciones supraestatales, recortarán aún más
los derechos de los trabajadores/as, debilitarán escandalosamente la seguridad
alimentaria y dificultarán enormemente el avance hacia sociedades más justas e
igualitarias. Exigimos que las organizaciones políticas que se reclaman progresistas
asuman el compromiso de luchar contra la firma y/o ratificación de dichos tratados, que
la llamada Unión Europea y los Estados Unidos están negociando de forma oscurantista
a espaldas de los ciudadanos y de las propias instituciones políticas.
5. Exigimos que los partidos y coaliciones que piden nuestro voto en las próximas
elecciones y que se presentan como “vehículos del cambio” lleven en sus programas, y
cumplan luego sin dilaciones, la revocación de la modificación impuesta por el tándem
PP-PSOE al artículo 135.3 de la Constitución que obliga a priorizar el pago de la
“deuda” financiera sobre los gastos en bienes y servicios básicos (educación, sanidad,
vivienda, dependencia…) Asimismo, exigimos que en dichos programas figure con
claridad la derogación de las reformas laborales auspiciadas primero por el PSOE, en su
época de gobierno, y luego por el PP, la derogación de la “Ley Mordaza”, de la
LOMCE y de la Ley de Reforma de la Administración Local, por su carácter
antidemocrático y de restricción de derechos. Reivindicamos una economía centrada en
lógicas alternativas al capitalismo que, más allá de la acumulación de capital, de riqueza
y de poder apueste por el mantenimiento y el enriquecimiento de la vida de las personas.
6. Nos unimos a las organizaciones y colectivos que plantean una Amnistia Social, o al
menos un indulto inmediato, para todos aquellos que sufren cárcel o fuertes multas por
haber ejercitado el derecho de expresión o de manifestación en el contexto de las luchas
por los derechos sociales. No es de recibo que mientras Andrés Bódalo, Alfon, Carlos y
otros luchadores sociales cumplen condenas por haberse destacado en la defensa de los
derechos sociales, y otros compañeros y compañeras son perseguidos y multados con
cantidades desmesuradas, la inmensa mayor parte de los corruptos políticos y de los
delincuentes económicos gocen en la práctica de impunidad o sufran sólo sanciones
ridículas gracias a sus redes de influencias y a las maniobras para conseguir que sus
delitos prescriban.
7. Exigimos que cualquier partido o futuro gobierno que se considere progresista y
contrario a las desigualdades sociales asuma el compromiso de establecer una Renta
Básica Universal e Incondicional, mediante una reforma fiscal adecuada, como la vía
más eficaz para garantizar a corto plazo el derecho humano más fundamental -el
derecho a la propia subsistencia- erradicando la pobreza severa y poniendo a quienes
buscan empleo en mejores condiciones respecto a los potenciales empleadores al quitar
a estos su actual enorme capacidad de chantaje para imponer condiciones salariales y de
trabajo indignas. Ningún tipo de subsidio condicionado, o de ayuda, puede sustituir a la
RBU en su eficacia y consecuencias.
8. Nos ratificamos en que es preciso hacer realidad el ideal de Blas Infante de que “en
Andalucía nadie sea extranjero”. Ello significa estar abiertos a acoger a los Refugiados
que huyen de la muerte y la destrucción causadas por las guerras, en la mayoría de los
casos promovidas por intereses financiero-industriales e imperialistas, y también a los
que huyen de la miseria o la carencia de horizontes provocadas por el hambre o el
empobrecimiento de sus países. Condenamos las políticas de No-asilo y de No-
inmigración de la Unión Europea, de los gobiernos de los 28 estados que la forman, del
Estado Español y de la Junta de Andalucía (que mira hacia otro lado como si nada
tuviera que ver en el problema). Proclamamos Andalucía como Tierra de Refugio y
como Patria también de aquellos que la hayan perdido. Sólo así podremos ser
coherentes con lo que cantamos en nuestro himno: “Sean por Andalucía libres los
Pueblos y la Humanidad”.
9. Desde AdA, planteamos la necesidad de que los medios de comunicación, y en
especial los públicos, reflejen la realidad andaluza de manera completa, sin manipular ni
ocultar los mecanismos que, desde el poder, se utilizan para el mantenimiento de la
actual situación de subordinación. Reivindicamos, por tanto, unos medios de
comunicación que trabajen para el despertar de la conciencia nacional del pueblo
andaluz.
10. En relación a la lengua andaluza:
- En los medios de comunicación, que se use la lengua andaluza y no el castellano en
detrimento de la misma.
- Acceso a través de la educación pública al conocimiento y uso de la lengua andaluza.
- Instar a las instituciones el fomento de la lengua como un concepto cultural e
histórico, como sello de identidad.
Andalucía, 14 de Mayo de 2016.
