A modo de crónica reproducimos el texto publicado en el facebook de nuestro compañero Isidoro Moreno:
Ayer, en Granada, con-memoramos (volvimos a pasar, juntos, por nuestra memoria) el 4D, Día Nacional de Andalucía. Y volvimos a repetir que sin Soberanía Política, sin derecho a decidir, no habrá futuro para nuestro Pueblo, porque no tendremos los instrumentos necesarios para encarar nuestros muy graves problemas, que son resultado de la dependencia económica, la subalternidad política y la degradación cultural. Unas tres mil personas (que no setecientas, como señalaron algunos medios de prensa) recorrimos el centro de Granada y una de las calles más bellas del mundo: la carrera del Darro. Se repitieron frases como "Andalucía, por su Soberanía" y "Contra el fascismo, soberanismo". Y predominó la gente joven, lo cual es una muy buena cosa.
Hubo también, como parece inevitable, inadecuados intentos de protagonismo por parte de algún personaje cuyo objetivo parece ser chupar micrófonos e intentar capitalizar en provecho propio cualquier movilización popular, pero el principal protagonismo, ayer, fue colectivo. Faltó también gente que quizá debería haber estado allí y que, por sectarismo o por errores o malentendidos respecto a la organización del acto, no estuvieron presentes. Espero y deseo que, más pronto que tarde, se abra la necesaria confluencia de las organizaciones soberanistas. Y ni señal hubo de partidos que durante la campaña electoral habían utilizado profusamente la verdiblanca. Como ayer ya no era tiempo de pescar votos, huyeron, como el año pasado, de la palabra misma Soberanía . Como también lo hicieron los instalados en un "andalucismo" más folklórico que otra cosa de frases vacías de verdadero contenido político.
Ayer algunos decían que hay que ir preparando ya el 4D de 2019. Creo que yerran. Habrá tiempo para esto. Ahora, lo que hay que preparar, y asumir -pienso que con urgencia-, es la tarea diaria para hacer avanzar el soberanismo; para convencer a nuestras gentes de que sin soberanismo no tenemos futuro. Y ello solo se conseguirá mediante nuestra implicación en lo concreto: en las luchas y aspiraciones de los sectores sociales populares y en abrir espacios -en lo económico, lo social, lo cultural y lo político- que respondan a una lógica diferente a la del capitalismo globalizado neoliberal que hoy ahoga a Andalucía (y al mundo). El fin del régimen psoísta es una buena oportunidad para profundizar en esta tarea.
Está muy bien, y es imprescindible, mantener viva la llama del 4D y activar anualmente su significado. Ayer lo hicimos. Está bien denunciar la extensión de las ideas fascistas y parafacistas (no solo en Vox). Pero para que sea posible en el futuro un 4D masivo, que signifique realmente un punto de inflexión en la conciencia de nuestro Pueblo (como lo fueron los de 1977 y 1979) lo más importante es la implicación en el trabajo diario y continuo. Si no lo hacemos, correremos el riesgo de quedarnos en la nostalgia de lo que pudo ser y no fue. Hay que apostar fuerte por lo que es necesario que sea. Depende de nosotr@s.
